Noticias Laborales

Semana de Junio 17, 2013

El Cuidado de la Salud con Fines de Lucro Mata

Actualmente no es legal para empresas con fines de lucro poseer hospitales en el estado de Nueva York. Pero empresas de Wall Street y la legislatura estan tratando de cambiar esto.

Un sindicato de enfermeras está luchando para salvar un hospital de Brooklyn de ser vendido a una empresa de Wall Street. “El cuidado de la salud con fines de lucro mata,” dijo la enfermera Jill Furillo de la Asociación de Enfermeras del Estado de Nueva York. “Lo he visto en otros estados.”

Los trabajadores de la salud apuraron al Hospital Long Island College (LICH por sus siglas en inglés) el 20 de junio para tener una reunión de emergencia –después de que los administradores empezaron a derivar a pacientes a otros lugares.

Las ambulancias recibieron instrucciones de enviar pacientes a otras instalaciones, y a los médicos se les dijo que transfirieran a sus pacientes a otro lado.

Las acciones del hospital iban en contra de la orden de un juez que dictaba mantener los niveles de contratación de personal.

Iniciativas en la legislatura estatal abrirían las puertas para que los hospitales puedan ser propiedad de empresas con fines de lucro. Aunque da servicio a comunidades de personas de color de bajos ingresos, el LICH es una propiedad de primera. Para los desarrolladores –que quieren poner condominios ahí— el hospital vale más muerto que vivo.

Trabajadores de hospitales en Massachusetts han conseguido ya una prueba de lo que significa cuando Wall Street se convierte en tu jefe. El organismo Steward Health Care empezó a despedir trabajadores mientras iba metiendo dinero en sus construcciones –para poder revenderlas más tarde.

Y en Nueva Jersey, las enfermeras están tratando de que el estado apriete las reglas: si una empresa con fines de lucro compra un hospital, dicen, tiene que hacer un compromiso de mantener abierto el hospital y proporcionar más atención caritativa durante 10 años.

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Huelga de Hambre para Seguridad Escolar

Dos padres y dos empleados de comedor escolar se han comprometido a no consumir más que agua hasta que la ciudad de Filadelfia y el estado de Pennsylvania lleven a cabo acciones sobre la seguridad escolar.

¿Su demanda? Preservar los empleos sindicalizados de los empleados de comedores escolares, que el distrito escolar de Filadelfia planea despedir.

El grupo (de padres de familia y empleados de comedores) Fast for Safe Schools instaló el 17 de junio una tienda de campaña enfrente de la oficina del gobernador.

Una persona que está en huelga de hambre es Earlene Bly, una madre de un/a estudiante de noveno grado, abuela de un/a estudiante a punto de empezar la escuela primaria, y miembro de personal de comedor. Un ambiente escolar, ella dijo, necesita tener presentes a personal de seguridad para los estudiantes, para contener o bajar de nivel, conflictos potencialmente violentos.

El distrito de Filadelfia tiene una larga historia de falta de financiamiento y crisis. En los años pasados, ha llevado a cabo un programa radical de cierre de escuelas, privatización y recortes de personal.

En marzo, a pesar de la desobediencia civil y el arresto de 17 manifestantes, el distrito votó la aprobación del cierre de 23 escuelas. En mayo 30, aprobó un presupuesto que elimina al personal de cafetería, bibliotecarios escolares, subdirectores, y muchos otros miembros del personal de apoyo.

En respuesta, 3,000 estudiantes de secundaria organizados por Jóvenes Unidos para el Cambio y la Unión de Estudiantes de Filadelfia tomaron las calles –demandando que el gobernador y el Alcalde encuentren los fondos necesarios para financiar el sistema escolar.

Los que están en huelga de hambre han visto un torrente de apoyo por parte de otros afectados por los cierres y recortes. Las organizaciones estudiantiles, otros sindicatos, y organizaciones comunitarias, han visitado su tienda de campaña y han participado en sus manifestaciones (piquetes) durante las tardes/noches.